martes, 23 de octubre de 2007

MONTE PERDIDO JULIO 2006

SUBIDA A MONTE PERDIDO, JULIO 2006

Al fin, al cabo de un montón de años, aquí estamos de nuevo la family en Ordesa, dispuestos a atacar nuestro primer tres mil(para algunos),en la foto sonrientes porque acabamos de empezar..
















Al fondo el Valle de Ordesa y a la izquierda el Perdido.



Al fondo el valle de Ordesa, foto desde las clavijas de Soaso.


Al fondo Góriz, después de plantar la tienda y caer una granizada importante..
Al fondo la cima del Perdido, foto desde el lago helado. Al fondo el lago helado y detrás el Marboré.
En plena escupidera...la pendiente te da una idea de lo que eso puede llegar a ser con hielo o nieve..uff!! Vistas desde la cima del Perdido,a la izquierda el lago Marboré y a la derecha el Valle de Pineta.
Objetivo cumplido!!y caras de desolación por las ampollas en los pies, el cansancio y el chaparrón que nos ha caído encima!!

sábado, 20 de octubre de 2007

VIAJE A ORDESA OCTUBRE 2007

PRIMER DIA:TORLA-GORIZ

Después de pasar mucho frío en el camping de Torla,a las ocho de la mañana estábamos en el parking de Ordesa,tras cargar los muchos kilos de mochila al hombro, nos hacemos el ánimo y empezamos a subir por la senda de los cazadores.Una senda muy empinada al principio hasta llegar al mirador de Calcilarruego de donde se disfruta de una panorámica impresionante del Valle de Ordesa y de la cascada de Cotatuero.


De aquí en adelante la senda va casi todo el rato al mismo nivel, cosa que se agradece, en este último tramo vemos desde las alturas las gradas de Soaso, la pradera y la Cola de Caballo, la senda desemboca en el zig-zag. A lo largo del sendero nos encontramos azafrán silvestre también llamado engañapastores y los archifamosos edelweis.










Sobre las tres de la tarde llegamos arriba del zig-zag, nos a costado llegar un poco más de tiempo que si hubieramos subido por el valle, pero las vistas merecen la pena, a pesar del dolor de hombros del peso de la mochila. Finalmente a las cuatro llegamos a Góriz y tras descansar un rato y disfrutar de las vistas montamos la tienda y nos hacemos unos spagetti carbonara de sobre que nos saben a gloria, y de un salto al saco de dormir que hace un frio que pela!!.

SEGUNDO DÍA: GÓRIZ-BRECHA DE ROLANDO.

Después de pasar una noche de perros debido al frío, recogemos trastos y alquilamos una taquilla en el refugio para dejar el máximo de peso posible fuera de nuestras mochilas, a las nueve empezamos el camino hacia la Brecha de Rolando por la senda que queda detrás del refugio, al oeste, cruzamos el barranco de Soaso y vamos en sentido ascendente hacia el circo de Góriz , subimos un rato por una senda muy bien marcada, luego trepamos unos metros por una pared y seguimos por una senda que nos lleva a los llanos de Millaris, de aquí en adelante el camino no tiene perdida la senda no se pierde y la ruta es clara.




Al fondo se veía el collado del Descargador, lugar por el cual tenemos que subir. Al llegar a los llanos de Millaris tomamos a la izquierda una senda que nos lleva al collado del Descargador.
Cuando llegamos al collado fuimos hacia la derecha por una faja muy cómoda. La senda acababa en unos bloques de piedra un poco pesados que nos llevaron a la Gruta de Casteret, desde el principio de los bloques de piedra vimos ya la famosa falsa Brecha y el dedo, y un poco más adelante la impresionante mole de la Brecha de Rolando. Pasando la cueva de Casteret empieza una subida por grandes piedras hasta la base de la pared de la Brecha desde donde se ven la cadena y el hueco de la Brecha.
La vuelta al refugio la hicimos rápido ya que habíamos pasado mucho frío por la noche y decidimos pasar por Góriz a recoger las cosas, comer y bajar a Torla el mismo día para dormir un poco mejor.Llegamos a Góriz a las tres de la tarde descansamos y tomamos un bocado, a las cuatro empezamos la bajada un poco pesada debido a mis lesionadas rodillas,así que para acortar algo de tiempo bajamos por las clavijas de Soaso hasta la base de la Cola de Caballo, de aquí en adelante bajamos ligeros por el valle para llegar al parking a las siete y media, con la satisfacción de haber hecho nuestra primera travesia solos y de haber gozado de la montaña.